- 4 gotas de lavanda
- 2 gotas de mejorana
- 2 gotas de manzanilla
- 3 gotas de geranio
- 1 gota de jengibre
- 30 ml de aceite portador con milenrrama
DOLORES ARTICULARES
Los trastornos crónicos que afectan las articulaciones requieren un tratamiento que vaya más allá de la analgesia. En este sentido, son útiles los aceites con propiedades antiinflamatorias, desintoxicantes y alcalinizantes.
Ingredientes:
- 6 gotas de helicriso
- 4 gotas de mejorana
- 2 gotas de junípero
- 4 gotas de abedul
- 3 gotas de manzanilla
- 3 gotas de lavanda3 gotas de jengibre
- 60 ml de aceite portador
Después de mezclar los ingredientes, el resultado se puede usar para masajear las zonas afectadas o para el baño.
El tratamiento se completa con una dieta antiinflamatoria que incluya pimienta de cayena, jengibre, mostaza y rábano picante, así como con plantas medicinales como ulmaria, corteza de sauce, harpagofito y diente de león.
AFECCIONES RESPIRATORIAS
No existe mejor tratamiento para la congestión, el dolor de garganta o la tos causados por resfriados y gripes que las inhalaciones de aceites esenciales. Son también un eficaz agente preventivo de las infecciones porque determinados aceites pueden eliminar los virus presentes en el ambiente.
Ingredientes:
- 3 gotas de eucalipto
- 1 gota de menta
- 2 gotas de pino
- 1 gota de árbol de té
- 2 gotas de bergamota
En una olla mediana, se llevan a ebullición 100 ml de agua, se apaga el fuego y se espera un minuto. Se echa la mezcla de aceites y se inhala el vapor, teniendo cuidado de no quemarse. Se puede rodear la cabeza con una toalla sobre la olla para que no se disperse el vapor.
Combinando la mezcla de aceites con 30 ml de agua se obtiene una solución apta para ser pulverizada en todas las habitaciones de la casa.
Si en lugar de agua añadimos 30 ml de un aceite portador tenemos un bálsamo que puede extenderse por el pecho.
También puede impregnarse un pañuelo de papel con los aceites para inhalarlos en cualquier lugar.
BAÑO RELAJANTE
Los aceites esenciales con propiedades relajantes actúan directamente, a través del órgano vomeronasal, sobre el lugar del cerebro donde mente y cuerpo se conectan. La siguiente es una fórmula relajante y antidepresiva.
Ingredientes:
- 3 gotas de lavanda
- 3 gotas de neroli
- 2 gotas de mejorana
- 2 gotas de ylang ylang
- 1 gota de manzanilla
- 2 gotas de salvia esclarea
- 30 ml de aceite portador
La mezcla puede utilizarse para hacer masajes de cuerpo entero o de pies. Sin el aceite portador puede añadirse al agua de baño caliente.
REFUERZO DE LAS DEFENSAS
Muchas plantas tienen efectos inmunomoduladores que también atesoran sus aceites esenciales. Algunos de éstos se basan en la acción antibacteriana y antivírica. Los aceites ricos en terpenos, como los de frutas cítricas o de pino, poseen una acción muy específica en este sentido. La siguiente mezcla se puede definir como un tónico inmunitario.
Ingredientes:
- 3 gotas de lavanda
- 3 gotas de árbol de té
- 2 gotas de bergamota
- 2 gotas de ravensara o de laurel
- 2 gotas de eucalipto10 gotas de calófilo
- 30 ml de aceite portador
La mezcla puede utilizarse como aceite para aplicarlo después de la ducha diaria o para tratar, mediante un masaje, enfermedades agudas, como un resfriado o una gripe.
Para evitar eficazmente las enfermedades, además de la aromaterapia es necesario llevar un estilo de vida sano que incluya ejercicio físico, descanso y alimentación equilibrada. Las plantas medicinales adaptógenas, que ayudan al sistema inmunitario, pueden tomarse preventivamente. Son especialmente recomendables el ginseng, la ash-waganda y el romero.
Guía para usar bien los aceites
PRECAUCIONES: Los aceites esenciales deben ser enteramente puros, sin aditivos y, si es posible, de producción ecológica. No deben aplicarse directamente sobre la piel –salvo prescripción médica– sino diluidos en un aceite portador. Aun así, antes de extenderlos por una zona amplia se debe hacer una prueba en el brazo o la nuca para descartar una posible reacción alérgica (hay que esperar doce horas). No conviene utilizar la misma mezcla de aceites más de dos semanas seguidas. No hay que exceder la dosis de 10-12 gotas por cada 30 ml de aceite portador.
LOS ACEITES PORTADORES: Son el vehículo para aplicar los aceites esenciales. Ablandan y nutren la piel, y suelen contener de manera natural vitamina E, que impide la oxidación de los aceites esenciales. Los más utilizados son el aceite de almendras dulces y el de pepita de uva, aunque éste es más ligero.
EL MASAJE: El objetivo es extender la mezcla de aceites por la zona afectada para que sea absorbida. Debe ser un masaje de movimientos circulares, suaves y agradables. Los masajes enérgicos o profundos sólo deben ser realizados por profesionales.
LOS DIFUSORES: Existen varias maneras de dispersar los aceites esenciales en el ambiente. Los difusores de cerámica utilizan una vela de té para calentar una pequeña cantidad de agua donde se echan los aceites. Los más sofisticados son eléctricos y hacen pasar el aire a través de los aceites. Como no los calientan, se considera que conservan mejor sus propiedades terapéuticas. También se puede recurrir a los pulverizadores (los aceites se mezclan con el agua).