Esperar significa "tener esperanza, creer y desear conseguir alguna cosa" y esto conlleva "vivir en el futuro" olvidando que lo único real, palpable y verdadero es el momento presente, "vivir en el presente"
¿Quién no ha esperado que algo o alguien le dé la felicidad?...
Desde mis vivencias y recorrido en esta vida hasta el hoy, a la cual he venido para recibir muchas “enseñanzas” puedo hacerme "protagonista" como much@s otr@s de esperar y esperar que algo o alguien venga para darme la VERDADERA FELICIDAD.
Me he pasado media vida recibiendo “enseñanzas” que no entendía para llegar a tomar conciencia de que la clave está en nosotr@s, que podemos sufrir "las de Caín" y que éstas solo vienen a nosotr@s para RECORDARNOS que mirando dentro, escuchando a nuestro Ser Superior, a nuestra LUZ INTERNA, encontramos la respuesta a tanta desdicha que creemos vivir, el PARA QUÉ llega a nuestra vida... con el tiempo, me dí cuenta, que perdí el tiempo buscando en el exterior lo que pude encontrar en mi interior.
Nos merecemos mucho más de lo que creemos merecer y para ello quizás sea necesario "desaprender" la cantidad de creencias limitantes que llevamos marcadas en nuestra mente para dar paso a otro tipo de creencias ilimitadas que nos permitan ser lo que somos, algo más que un cuerpo físico que tiene una duración limitada de existencia.
Dejemos de esperar que llegue "nuestra salvación" pues solo nosotr@s podemos "salvarnos". Seamos honestos con nosotr@s mism@s y con l@s que nos rodean viviendo la vida que queremos vivir, aún cuando dejemos de cubrir las expectativas de los que están cerca y nos quieren porque lo más importante para conocer la VERDADERA FELICIDAD, es cubrir nuestras expectativas y querernos a nosotr@s mismos para que transpase los límites de nuestro cuerpo físico y llegue a l@s demás.
- Nos pasamos media vida esperando que alguien o algo nos dé la felicidad y tan solo hemos de mirar adentro, en nuestro interior, para encontrar la FELICIDAD VERDADERA.
- Nos pasamos media vida esperando que nos toque la loteria y si apreciáramos lo que somos en ESENCIA, nos daríamos cuenta que desde el día que nacemos somos millonarios.
- Nos pasamos media vida esperando que alguien coja nuestros trocitos cuando decaemos y si miramos bien, solo nosotros conocemos la forma idónea de ensamblar correctamente lo que antes se partió.
- Nos pasamos media vida esperando “un golpe de suerte” para cambiar la vida que no nos gusta vivir y con un poco de perseverancia, confianza y amor a nosotr@s mism@s podemos vivir la vida que queremos vivir.
- Nos pasamos media vida esperando que tod@s los que están cerca nos quieran y olvidamos que el AMOR es como el eco, fluye de dentro a fuera, si antes no expesamos el que tenemos en nosotr@s, el exterior nos devolverá lo que escuchó.
- Nos pasamos media vida esperando que la alegría y la felicidad estén presentes siempre en nuestros días y sin la tristeza y la infelicidad, sería imposible que existieran las otras.
- Nos pasamos media vida esperando que reconozcan nuestra valía cada vez que realizamos algo y cuando “entregamos” sin condiciones al Universo, aparece nuestra mayor recompensa, el reconocimiento de nuestra valía como seres únicos e irrepetibles.
- Nos pasamos media vida esperando que el camino de nuestra vida sea llano y sin curvas, olvidando que dejamos de lado la sorpresa que podemos encontrar después de algo que nos impide ver lo que hay detrás.
- Nos pasamos media vida esperando que el pasado cambie y el futuro sea maravilloso, y mientras dejemos de vivir el AHORA y el AQUÍ con toda la intensidad, es decir, el presente, el tiempo perderá su esencia.
- Nos pasamos media vida esperando y en realidad si dejamos de esperar, la vida sigue fluyendo al ritmo que necesitamos para nuestro propio beneficio y crecimiento interior.
P.D. Este escrito salió hace más de una semana y por lo visto y lo vivido en el día de hoy, ahora ha sido el momento adecaudo de publicarlo.
